La fisioterapia es la disciplina terapéutica que trata de diagnosticar, prevenir y solventar diversas patologías físicas.
No se limita simplemente a un conjunto de procedimientos o técnicas; el fisioterapeuta debe tener un conocimiento profundo de sus pacientes para tratarlos en su globalidad bio-psico-social por la estrecha interrelación entre estos tres ámbitos.


 El fisioterapeuta realiza una valoración previa y personalizada para cada enfermo, emite un diagnóstico en función del cual plantea unos objetivos terapéuticos y elabora un protocolo utilizando para ello los agentes físicos propios y exclusivos de su disciplina.
Estos son muy diversos, los más conocidos son los masajes y la manipulación vertebral y de articulaciones, pero las técnicas de fisioterapia van mucho más allá: kinesiterapia, reeducación postural, control motor, estiramientos, vendaje funcional, masoterapia, magnetoterapia, presoterapia…


La labor del fisioterapeuta consiste analizar cada caso para aplicar una o varias de estas técnicas para lograr la recuperación del paciente con el menor número posible de sesiones.